La fórmula del éxito (en tus propósitos)

El título es pretencioso, y te aseguro que no es porque yo disponga de una fórmula secreta para todo. Sino más bien, porque muchos de nuestros objetivos en la vida se consiguen con el tiempo y de una manera sencilla.

Cuántas veces has escuchado que para conseguir X sólo tienes que hacer la acción Y un poquito cada día. Estoy seguro que muchas. Y esta acción Y, la mayoría de las veces no supone ningún esfuerzo. Veamos algunos ejemplos de objetivos y estrategias para conseguirlos:

  • Ahorrar cuando nunca llegas a fin de mes >> Puedes poner en una hucha 1€ (o 2€) cada día. Una vez al año, abre la hucha y seguro que puedes darte un capricho o pagarte parte de las vacaciones.
  • Mejorar tu movilidad general >> Puedes hacer de 3-5 minutos de movilizaciones generales por la mañana, o antes de ir a dormir.
  • Leer más, cuando nunca tienes tiempo >> Propónte leer una (o dos) páginas cada día. Verás como poquito a poco se van terminando los libros.
  • Mejorar tu #handstand >> Puedes hacer un par de series de 30s-1min contra la pared cada día para construir esa fuerza necesaria para irlo aguantando poco a poco.

Los de arriba son sólo algunos ejemplos de objetivos o propósitos que podemos tener y que con pocos minutos al día, son fáciles de conseguir porque el tiempo juega a nuestro favor (y te aseguro que el tiempo pasa muy rápido).

Entonces, aquí viene quid de la cuestión:

Si es tan fácil hacerlo y ocupa tan poco tiempo, ¿por qué no lo hago?

[…] las cosas que son fáciles de hacer, también son fáciles de NO hacer.

La diferencia entre el éxito y el fracaso consiste entonces en hacer aquellas cosas fáciles, o no hacerlas. Así de sencillo.

El problema que nos encontramos siempre,  es que las cosas que son fáciles de hacer, también son fáciles de NO hacer. En esto reside la clave del éxito, la mayoría de veces lo que es fácil de hacer, que no ocupa tiempo y que puede traernos muchos beneficios, es a la vez fácil de no hacer, y por eso no obtenemos los beneficios. Traslada esto a cualquier escenario de tu vida, y verás que aquellas pequeñas cosas que has ido haciendo a lo largo del tiempo y sin esfuerzo, te han terminado repercutiendo en unos dividendos o en unos beneficios importantes, mientras que otras cosas que aunque a priori parecían sencillas, simplemente por el hecho de no hacerlas no te han traído los beneficios que sí han traído a otras personas que han sido constantes y han hecho los deberes.

Así que si sabes cuál es la clave, el movimiento o la acción que tienes que hacer, aunque sea sencilla, hazla cada día, todos los días, sin faltar ninguno, porque lo que más te va a ocupar son 3 o 4 minutos y eso, es lo que te separa del éxito.

La mayoría de fracasos en los objetivos que nos proponemos, provienen de la inacción, mucho más que por la acción, así que ¡toma las riendas de lo que quieres hacer, y hazlo!

Por último, me despido con un consejo que a mí me ha ido sirviendo mucho a no posponer cosas que tienes que hacer: Si tardas menos de 2 minutos en hacerlo, hazlo ahora.

¡Si tardas menos de 2 minutos en hacerlo, hazlo ahora!

 

Referencias:

La información de este artículo es una mezcla de ideas de artículos que he ido sacando de Napoleón Hill, Jim Rohn y de la filosofía GTD (Getting Things Done). Si os ha interesado el tema, no dudéis ahondar más en estas tres fuentes de información.

Y, si consideras que este artículo puede ayudar a otros, te agradezco que lo compartas y hagas difusión.

Un abrazo,

Carlos

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s